“Nadie educa a nadie, nadie se educa a sí mismo. Los hombres se educan entre sí mediatizados por el mundo porque nadie ignora todo, nadie lo sabe todo.”
Paulo Freire.
Pablo Hernández Marín. Politólogo.
Israel López Marín. Pedagogo Social.
Paulo Freire y la “Pedagogía del Oprimido”.
Israel López (IL): Hablar de Paulo Freire es hablar de una referente universal de la pedagogía critica. Pedagogo y filósofo de origen brasileño supo entender la realidad que estaba sucediendo en el continente americano y supo aportar una metodología propia para construir comunidad desde la conciencia de los problemas sociales.
Pablo Hernández (PH): El acercamiento a su obra supone un acercamiento al contexto de América Latina. Un aspecto que me llamo mucho la atención era precisamente entender el contexto de preindustrializacion de Latinoamérica y cómo todas sus condiciones culturales se ven reflejadas en sus obras. Además, Paulo Freire además de ser pedagogo, es filósofo. Desde mi área de conocimiento, puedo considerar a Freire y a su obra como esencial para la disciplina, además de entenderla como una aplicación del marxismo a su realidad y al contexto histórico en el que Paulo Freire vivía, bastante acertada. A través de su obra podemos entender como el marxismo no es un dogma, sino que nos permite contextualizarlo, más allá de la lucha de clases, la dialéctica de clases, referenciado por Freire en la dicotomía Opresor-Oprimido, en torno a la educación. Referencias a esto también podemos encontrarlo en la obra de Habermas, concretamente en “La teoría de la acción comunicativa”, y el valor del diálogo. Considero a Freire como un autor indispensable en cualquier área de conocimiento.
(IL): Efectivamente, entender América Latina como un continente hermano de hispanohablantes es entender una gran comunidad con una escuela de conocimiento propia. En ocasiones, desde España tenemos la aspiración de querer asemejarnos a las escuelas anglosajonas o a las escuelas heredadas de los países protestantes, como son los países nórdicos, cuando nuestra base cultural, empezando por la lengua común, es más cercana a muchas corrientes y escuelas de América Latina. Considero necesario poner en valor a grandes autores y autoras, y a corrientes de pensamiento latinoamericanas, primero porque nos hace enfrentarnos al etnocentrismo, nos hace cuestionarnos los medios de producción académica de occidente y el papel que juega en la creación de pensamiento, y en este caso, Paulo Freire manifiesta ser un gran conocedor de este “tablero de juego”. No sé si, al igual que Marx con El Manifiesto Comunista, Freire quiso a través de su obra dejar patente una nueva manera de enfocar la praxis y de entender la acción social, o simplemente su bagaje le llevo en esa dirección. De todas formas, Freire parte de un contexto donde en Brasil se prolongaba una dictadura con otra, mientras que, en el resto del continente, entendiendo como continente a América Latina, estaba siendo castigado por el imperialismo estadounidense a través de la CIA y sus estrategias para destruir el tejido civil mediante el uso de grupos paramilitares, tráfico de drogas, proliferación de sectas religiosas… En este contexto, Paulo Freire crea “Pedagogía del Oprimido” como una obra que rompe con el esquema de educación contemplado desde occidente y como una necesidad de entender la realidad de su contexto.
(PH): Es cierto, el mundo anglosajón siempre se ha mantenido muy unido a nivel de producción académica, países como Reino Unido, Estados Unidos y Australia, a través de la Commonwealth, han mantenido relaciones de producción académica de manera histórica, que, a su vez, han servido para perpetuar esta hegemonía. Sin embargo, el castellano, se habla en una gran diversidad de países con los que podríamos tener una relación más estrecha de colaboración académica. Aproximarnos a este tipo de literatura y a diferentes maneras de entender el mundo, nos puede dar claves para entender nuevas realidades.
(IL): Si, además, considero que “Pedagogía del Oprimido” es un texto muy actual en el momento que estamos viviendo. Es un documento revisable, que requiere de adaptación al momento actual. Sigue siendo vigente la necesidad de la toma de conciencia por parte de las comunidades oprimidas. En Europa, sin ir más lejos, siguen siendo alarmantes los índices de fracaso escolar de ciertos pueblos o de ciertos colectivos, algo que nos hace plantearnos la necesidad de un cambio del sistema educativo de manera urgente, y que permita la emancipación real de las personas.
(PH): De hecho, la concepción bancaria de la educación parte de la idea de Marx de que “el Estado es el instrumento de dominación de una clase sobre otra”, sobre esta idea, lo que hace Paulo Freire es determinar cuál es el papel de la educación en torno a esta realidad. Una realidad donde el sujeto adquiere las capacidades y los anhelos que el modo de producción capitalista espera de ti, como un modelo de reproducción de la superestructura hegemónica económica del estado de opresión.
Dialéctica Opresor – Oprimido.
(PH): Para entender lo que plantea Freire con la dialéctica opresor-oprimido es necesario saber de dónde lo toma. Parte de la “Dialéctica del Amo y el Esclavo” de Hegel, y que ha trascendido a otros tantos filósofos como Marx o Althusser. La “Dialéctica del Amo y el Esclavo” se puede usar de analogía de muchas situaciones. La dialéctica como contradicción entre una tesis y una antítesis para ofrecer una síntesis, una nueva situación. El anhelo del esclavo será llegar a ser amo para poder conseguir su libertad, sin embargo, el esclavo tiene miedo de que si alcanza a ser amo, reproduciría esas mismas condiciones que él está sufriendo. El amo, lo único que pretende es tener reconocimiento por parte de otra persona como amo. La síntesis de este conflicto seria la abolición de la esclavitud y el reconocimiento de los esclavos como personas de la comunidad. ¿Cómo lo extrapola Freire? Partiendo de la dialéctica de clases en torno a la educación, la dialéctica opresor-oprimido en torno a la necesidad educativa, que él llama concientización, en el que el individuo se encuentra en situación de opresión. Donde la clase dominante extrae privilegios de la clase dominada. Al igual que Althusser afirma que, Marx resuelve la dialéctica del Amo y el Esclavo mediante el trabajo, yo considero que Freire resuelve la dialéctica del Amo y el Esclavo a través de la educación, a través de la alfabetización y a través de la concientización. Esto conforma la idea del espíritu que comienza en la alfabetización y finaliza en la emancipación.
(IL): Totalmente de acuerdo, tengo muy poco más que aportar. Es cierto que en el sistema opresor en el que Paulo Freire nos habla en su obra, es un estado opresor que crea “ceguera” sobre las clases oprimidas, un sistema que genera opresión y deshumanización a través de una serie de mitos fundacionales de esta deshumanización. Con el proceso de concientización, o de alfabetización critica popular, Freire está aportando las herramientas, no para que la clase oprimida tome conciencia de su estado para que recurran al falso mito de la promoción social, y así convertirse en opresores, sino que a través del proceso de concientización puedan superar la dialéctica opresor-oprimido. Considero que Paulo Freire es más actual que nunca, o nunca ha dejado de ser actual, algo que queda patente en los mitos de la clase oprimida que reflejan que la libertad individual te hace responsable de tu devenir personal. El mito del empresario, tan arraigado a las políticas liberales a través del discurso del esfuerzo. El mito heroico de la clase trabajadora, como un mito mezquino que pretende dividir a la clase obrera enfrentándolo entre ella por quien posee mayores recursos, algo tan presente en los medios de comunicación de masas o el mito de la promoción social. Ascensor social que nos muestra que, para dejar de ser oprimido, solo tenemos la opción de ser opresor. Extrapolando esto a un sistema educativo actual, de herencia tylerista, que sirve de herramienta de reproducción social. Un modelo educativo que se origina con el modelo prusiano y que pretende formar a una nueva mano de obra cualificada para el modelo de sociedad industrializada. Ante esta realidad, Paulo Freire pretende ser rupturista con este modelo de educación pública capaz de liberar a las clases populares. En todo momento, Freire habla de la necesidad de radicalizar las ideas, radicalizar la crítica y la práctica y generar praxis. Y con ello, radicalizar a las personas como un proceso de liberación capaz de romper con el statu quo de pasividad ante la violencia del opresor.
(PH): Radicalizar, entendiéndolo como tomar las cosas desde la raíz de las mismas. Claro, a entender la situación de las cosas desde la raíz.
Pedagogía del Oprimido.
(IL): Con el modelo educativo, Freire entiende su modelo de alfabetización rompiendo con la polarización de la tradición popular y la educación formal, tal y como expone también Eduardo Galeano en su poema “Los Nadie”. Freire rompe absolutamente con esa barrera invisible que categoriza a las clases oprimidas desde la óptica de las clases dominantes, y pretende alcanzar con su modelo de pedagogía critica un acceso de pleno derecho a la educación, así como derecho universal, un derecho colectivo a la cultura y a la educación.
(PH): El método de Paulo Freire, está basado en el procedimiento, y no en el resultado. Por eso, a la hora de establecer criterios de efectividad habría que centrarse en el propio procedimiento. Lo que ocurre de manera posterior en la emancipación de las personas, al menos en su obra “Pedagogía del Oprimido” no se concreta demasiado. Otro aspecto a destacar es la importancia del dialogo. Para Freire, el dialogo supone una acumulación de la esencia del ser humano que siempre va en progreso. Algo que viene del materialismo histórico y que se traduce en el contexto del autor en la dialéctica opresor-oprimido. Algo fundamental también, la importancia del concepto del ser humano en comunión. En el concepto de educación bancaria también queda reflejado el valor de entender su propuesta desde la colectividad y para la colectividad. Para Freire, la soberanía no reside en el individuo, sino en la colectividad. La crítica al modelo educativo actual desde una perspectiva vertical, Freire que afirma que es un posicionamiento perverso y hegemónico. Su propuesta parte de un dialogo horizontal. En occidente, tenemos la creencia de ser la vanguardia de cualquier movimiento, cuando no hemos aprendido aun a adaptar iniciativas como la que Freire propone. En la obra de Jacques Rancière “El maestro ignorante” se habla precisamente de la verticalidad del traslado de información, no como un proceso de aprendizaje, sino como un modelo de adiestramiento.
(IL): Estoy de acuerdo, la ruptura que supone la pedagogía dialógica y la educación liberadora con el modelo de educación bancaria, precisamente lo que se pretende romper con lo que el llama la “enfermedad de la narración”. Esas horas y horas donde el docente explica al discente como es la realidad, de manera totalmente unidireccional, como una “donación” al educando, sin que exista preguntas ni respuestas. Sin dialogo, como “vasijas vacías” que el educador debe llenar de contenido. Paulo Freire parte de una realidad en América Latina con un alto porcentaje de trabajadores agrícolas, trabajadores poco cualificados. Cuando habla de educación liberadora, rompe por completo el statu quo al cuestionarse como debe ser la alfabetización de personas, y de personas adultas concretamente, al superar ese modelo de alfabetización clásica basada en la conjugación de los tiempos verbales, por ejemplo, para construir un modelo educativo basada en el dialogo abierto y permanente, basado en la horizontalidad, capaz de construir comunidad y así poder problematizar la realidad. Sobre eso, construir comunidades de aprendizaje, un modelo que trasgrede al modelo individualista occidental. Con esto de Problematizar la realidad, Freire pretende que el opresor se reconozca como tal, y esto pasa por que el oprimido se reconozca como oprimido, y como en conflicto con el opresor. Como pedagogo puedo reconocer que todavía no ha existido ningún postulado que iguale la tesis de Paulo Freire. Freire pretende con la educación liberadora dicotomizar la reflexión, ser capaz de entender mutuamente, y de explicar mutuamente la praxis colectiva de lo que conlleva sentirse oprimido con el fin de transformarla, como dimensión política.
(PH): Además, es importante poner en valor la dimensión practica de Freire. Por lo general, los diferentes campos de conocimiento tienden a entender la realidad, y no a transformarla. De su obra podemos percibir influencias de Lenin, en relación con la práctica revolucionaria. El dialogo como vía esencial de transmitir un dialogo pragmático con su entorno, con las condiciones materiales donde se desarrolla la praxis revolucionara. De hecho, entiendo la obra “Pedagogía del Oprimido” para la educación, como lo fue “El Manifiesto Comunista” para la política. Me parece una obra clave para cualquier científico social que pretenda transformar la realidad.
(IL): Estoy de acuerdo, yo también interpreto las influencias de organización leninista en su obra. Para mi Paulo Freire ve en la educación una vía para desarrollar la praxis. Entiende la educación como una herramienta para desarrollar una vía revolucionaria. Considero que cometemos el error de mirar todo desde la óptica etnocentrista de occidente, pero Freire es capaz de representar en su obra a grupos poblacionales mucho más amplios de los que el sistema educativo formal occidental representa. Y ahí está la clave de su propuesta de ruptura con el modelo educativo orientado al modelo de producción hegemónico.
(PH): además Freire, de manera consciente o no, contribuye de la ética discursiva de su tiempo. Donde el dialogo y el método se encuentran por encima de todo. Una persona para querer ser escuchada, debe saber escuchar. En comunidad, a través de las herramientas que Freire propone, podría formar parte de la Ética Discursiva que nos propone Adorno o Habermas, en general la herencia Kantiana del siglo XX.
(IL): Estoy de acuerdo, la herencia de Kant en Paulo Freire es muy presente en su obra. Los filósofos ilustrados europeos están muy presentes en su obra. Filósofos como Kant o Rousseau, o Pestalozzi como pedagogo, está patente en la manera de exponer, en coherencia, sus ideas sobre la construcción de la liberación humana, la praxis liberadora, y el concepto de liberación permanente que también bebe de la influencia de Trotsky y su concepto de la revolución permanente. El proceso de deshumanización como constructo de Freire, guarda grandes similitudes con el proceso de humanización de Kant, solo que Freire lo enfoca desde el lado opuesto. Freire indica como desde esa situación de opresión hay que avanzar desde la práctica de una praxis liberadora a modo de revolución permanente que él llama la “lucha permanente de los pueblos” para recuperar la dignidad. De ahí se percibe una clara herencia del saber académico hegemónico europeo de la ilustración y lo sitúa en la América Latina de la segunda mitad del siglo XX.
(PH): Claro, debemos entender su obra desde su contexto. El contrato Social de Rousseau y la categoría de ciudadano como la mayor categoría jurídica que una persona puede tener en colectividad, supone la categoría esencial para el desarrollo de una comunidad. Con respecto a Kant, La Crítica de la Razón Práctica, tiene relación con Freire mediante el discurso, el dialogo y el método. La teoría permanente del dialogo, como Trotsky, es importante ponerlo en valor, porque considero que ya es momento de superar la contradicción existente. Siempre van a existir dualidades, incluso en una sociedad sin clases, siempre van a existir dualidades de cualquier tipo. Freire nos da herramientas para superar estas dualidades, y debemos aprovecharlas en todos los ámbitos del pensamiento y en la acción. La acumulación originaria que da lugar a la acumulación permanente de pensamiento, ensayo – error… son dicotomías, siempre va a existir eso. Mediante la superación, la síntesis y la lucha permanente, se puede superar. Y aunque no podamos reproducir el contexto que Paulo Freire traslada en su obra, para reproducir su método, si debemos aprender a usar las herramientas que nos ofrece, porque como he dicho antes, la obra de Freire es algo que se debe analizar por su procedimiento, no por sus objetivos.
(IL): si, Paulo Freire nos abrió un espectro de visión en un aspecto determinado. Bajo el influjo de occidente vivimos bajo la tradición académica del mundo anglosajón. Es necesario salir de esa visión etnocentrista y entender diferentes visiones del mundo desde otras perspectivas, y huir de dogmatismos irrefutables que nos limita a la hora de exportar los métodos en otros contextos.
(PH): Es cierto que toda la escuela de autores latinoamericanos es prácticamente desconocida para gran parte de las personas occidentales que hemos tenido como referentes a los autores occidentales, también porque desde la academia se nos ha trasladado esa corriente de flujo académico como el prioritario. A modo de curiosidad, la Escuela de Salamanca, el 90% de los textos han sido traducidos al inglés. Hasta donde llega la capacidad de acumulación de conocimiento anglosajón que tiene esa capacidad de trascender fronteras y culturas, mientras que aquí los autores de la escuela de América Latina sigue estando limitado en su acumulación y difusión. Freire abre la puerta a la posibilidad de entender el pensamiento desde otra perspectiva. Es necesario que abramos la mente hacia pensadores de otras lenguas y de otros contextos para entender el mundo desde otros ángulos.
Abril de 2021.